MAS DE DON CLAUDIO
(El Adelantado de Segovia, 10 de diciembre de 1982)
LA CIUDAD DE BURGOS
Por Claudio Sánchez Albornoz
Burgos era ya cabeza de condado en el año 863, cuando los musulmanes realizaron la gran expedición que terminó con la derrota del conde Rodrigo en La Morquera. Según los Anales Castellanos, fuente histórica de gran crédito, fue repoblada en 882. Los Anales Compostelanos y el Cronicón Burguense fechan en 884 la vuelta a la vida de la que había de ser ≪Caput Castellae≫.
El cerro en que se alzó, sin duda había servido de base a una vieja fortaleza, probablemente construida por los godos. Burgos es un nombre germánico. Tras su nueva puebla volvió a ser cabeza de Condado. Su historia llenó después de nobles páginas la Historia de España.
Tras su vuelta a la vida fue, empero, una población más de la larga serie de las que habían de llenar la Historia de España, primero en su solar peninsular y después en su solar americano; pueblas como coronación de una batalla o a la espera de ella, para coronar un éxito bélico o preparándose para alcanzarlo. No fue, empero, después una más de la larga serie de las que nuestros antepasados realizaron. Iba a tener largas y profundas proyecciones históricas. Pronto alcanzó importancia excepcional. ¿por su singular situación geográfica? ¿El soplo del destino? ¿La voluntad de Dios?
No es esta ocasión propicia para trazar su historia. La corona el haber llegado primero a ser el más importante centro urbano de Al-Quilé (Los Castillos) y después de ≪Castella Vetula≫. Nunca puede juzgarse el mañana de un recién nacido durante las primeras horas de su vida. Al celebrar su repoblación, limitémonos a señalar que Burgos debe su gloria histórica a esa Castilla que fue creciendo, creciendo hasta el sur, a través de llanuras y roquedas, hasta alcanzar las márgenes del Duero; después fue avanzando por los Extrema Durii, las tierras situadas entre el Duero y la Cordillera Central; más tarde al sur de los montes de la Nueva Castilla del Tajo y del Guadiana; posteriormente, al sur de Sierra Morena en Andalucía, la Castilla Novisima y, por último, a este lado del Atlántico, en el nuevo continente.
Burgos, Castilla, España, Maravilla, maravilla. Desde el cerro donde los godos alzaron un burgo hasta el Cabo de Hornos en la punta meridional de América. Una lengua que para los habituados al habla tradicional sonaba aún en el siglo XII como trompeta con tambor, pero que iban a hablar trescientosmillones de hombres. Un ímpetu bélico que llevó al autor del Poema de Almería a definir así a los castellanos: ≪Gente brava, gente fuerte que no teme beber las copas de la muerte. Pueblo de buenos vasallos y de bravos capitanes≫. (A través de la estepa castellana –al destierro con doce de los suyos- polvo, sudor y hierro – El Cid Cabalga≫).
Castilla que, con el león fraterno y las fraternas Nuevas Castillas, abrió los cordones de su bolsa para costear las bélicas empresas de la patria española, mientras los cerraban las otras regiones… Castilla, empobrecida y despoblada por siglos de esfuerzo y sacrificio…¡Castilla, Castilla, levanta tu frente, rememora el orgullo de tu glorioso ayer, disponte a una batalla por revivir tu viejo pasado! ¡Que un nuevo Cid vuelva a cabalgar por las llanuras, para rehacer tu Historia milenaria, anterior y posterior a la repoblación de Burgos hace más de mil años! ¡Para seguir siendo cabeza y corazón de nuestra, nuestra, nuestra España!. (Buenos Aires, 1982).
COMENTARIO A ESTAS PALABRAS DE DON CLAUDIO
El buen republicano nos escribe desde Buenos Aires. Nunca olvidó Don Claudio sus raíces castellanas. Sus afanes republicanos le expatriaron para el resto de su vida. Desde ese extrañamiento, exhorta a Castilla: “levanta tu frente” para que “un nuevo Cid vuelva a Cabalgar” para recuperar la historia castellana y la vigía de España. Ello lo cree posible porque Castilla es un pueblo que el Poema de Almería define como “≪Gente brava, gente fuerte que no teme beber las copas de la muerte. Pueblo de buenos vasallos y de bravos capitanes≫. Nos recuerda el origen germánico de Burgos, ergo de Castilla, su ímpetu guerrero hizo posible la nación castellana que, luego, sería mutada en española. La patria “nuestra España” de la que hubimos de costear en solitario “las empresas bélicas” mientras que “otras regiones” cerraban “los cordones de su bolsa”. Queda claro como esa “España, maravilla, maravilla” fue carga para los castellanos y beneficio para los otros, de una España a conveniencia del mediterráneo catalanista. Si, Castilla unida, no en los trozos en los que hoy la tiene partida la Constitución de 1.978,. Y, si con su genuina identidad, no cabe en la Constitución Española, ¿Deberá quedar fuera para poder ser ella misma. ?
(El Adelantado de Segovia, 10 de diciembre de 1982)
LA CIUDAD DE BURGOS
Por Claudio Sánchez Albornoz
Burgos era ya cabeza de condado en el año 863, cuando los musulmanes realizaron la gran expedición que terminó con la derrota del conde Rodrigo en La Morquera. Según los Anales Castellanos, fuente histórica de gran crédito, fue repoblada en 882. Los Anales Compostelanos y el Cronicón Burguense fechan en 884 la vuelta a la vida de la que había de ser ≪Caput Castellae≫.
El cerro en que se alzó, sin duda había servido de base a una vieja fortaleza, probablemente construida por los godos. Burgos es un nombre germánico. Tras su nueva puebla volvió a ser cabeza de Condado. Su historia llenó después de nobles páginas la Historia de España.
Tras su vuelta a la vida fue, empero, una población más de la larga serie de las que habían de llenar la Historia de España, primero en su solar peninsular y después en su solar americano; pueblas como coronación de una batalla o a la espera de ella, para coronar un éxito bélico o preparándose para alcanzarlo. No fue, empero, después una más de la larga serie de las que nuestros antepasados realizaron. Iba a tener largas y profundas proyecciones históricas. Pronto alcanzó importancia excepcional. ¿por su singular situación geográfica? ¿El soplo del destino? ¿La voluntad de Dios?
No es esta ocasión propicia para trazar su historia. La corona el haber llegado primero a ser el más importante centro urbano de Al-Quilé (Los Castillos) y después de ≪Castella Vetula≫. Nunca puede juzgarse el mañana de un recién nacido durante las primeras horas de su vida. Al celebrar su repoblación, limitémonos a señalar que Burgos debe su gloria histórica a esa Castilla que fue creciendo, creciendo hasta el sur, a través de llanuras y roquedas, hasta alcanzar las márgenes del Duero; después fue avanzando por los Extrema Durii, las tierras situadas entre el Duero y la Cordillera Central; más tarde al sur de los montes de la Nueva Castilla del Tajo y del Guadiana; posteriormente, al sur de Sierra Morena en Andalucía, la Castilla Novisima y, por último, a este lado del Atlántico, en el nuevo continente.
Burgos, Castilla, España, Maravilla, maravilla. Desde el cerro donde los godos alzaron un burgo hasta el Cabo de Hornos en la punta meridional de América. Una lengua que para los habituados al habla tradicional sonaba aún en el siglo XII como trompeta con tambor, pero que iban a hablar trescientosmillones de hombres. Un ímpetu bélico que llevó al autor del Poema de Almería a definir así a los castellanos: ≪Gente brava, gente fuerte que no teme beber las copas de la muerte. Pueblo de buenos vasallos y de bravos capitanes≫. (A través de la estepa castellana –al destierro con doce de los suyos- polvo, sudor y hierro – El Cid Cabalga≫).
Castilla que, con el león fraterno y las fraternas Nuevas Castillas, abrió los cordones de su bolsa para costear las bélicas empresas de la patria española, mientras los cerraban las otras regiones… Castilla, empobrecida y despoblada por siglos de esfuerzo y sacrificio…¡Castilla, Castilla, levanta tu frente, rememora el orgullo de tu glorioso ayer, disponte a una batalla por revivir tu viejo pasado! ¡Que un nuevo Cid vuelva a cabalgar por las llanuras, para rehacer tu Historia milenaria, anterior y posterior a la repoblación de Burgos hace más de mil años! ¡Para seguir siendo cabeza y corazón de nuestra, nuestra, nuestra España!. (Buenos Aires, 1982).
COMENTARIO A ESTAS PALABRAS DE DON CLAUDIO
El buen republicano nos escribe desde Buenos Aires. Nunca olvidó Don Claudio sus raíces castellanas. Sus afanes republicanos le expatriaron para el resto de su vida. Desde ese extrañamiento, exhorta a Castilla: “levanta tu frente” para que “un nuevo Cid vuelva a Cabalgar” para recuperar la historia castellana y la vigía de España. Ello lo cree posible porque Castilla es un pueblo que el Poema de Almería define como “≪Gente brava, gente fuerte que no teme beber las copas de la muerte. Pueblo de buenos vasallos y de bravos capitanes≫. Nos recuerda el origen germánico de Burgos, ergo de Castilla, su ímpetu guerrero hizo posible la nación castellana que, luego, sería mutada en española. La patria “nuestra España” de la que hubimos de costear en solitario “las empresas bélicas” mientras que “otras regiones” cerraban “los cordones de su bolsa”. Queda claro como esa “España, maravilla, maravilla” fue carga para los castellanos y beneficio para los otros, de una España a conveniencia del mediterráneo catalanista. Si, Castilla unida, no en los trozos en los que hoy la tiene partida la Constitución de 1.978,. Y, si con su genuina identidad, no cabe en la Constitución Española, ¿Deberá quedar fuera para poder ser ella misma. ?
Respecto de la etimología del nombre de Castilla, discrepo del origen moruno que se la atribuye por Don Claudio y muchos otros que le citan. Más bien creo que el verdadero origen se encuentra en "La tierra de Castros", véase la siguiente nota: Etimología del nombre Castilla:
'Castilla' viene de Castros celtas o Castillos. Castilla significa tierra de Castros celtas (tierra de castillos)
Amador Álvarez Mateo
'Castilla' viene de Castros celtas o Castillos. Castilla significa tierra de Castros celtas (tierra de castillos)
Amador Álvarez Mateo
